HEPATITIS VIRAL

Es un grupo de enfermedades infecciosas, la Hepatitis A, Hepatitis B y Hepatitis C provocadas por distintos agentes virósicos que afectan el hígado. Otras noxas capaces de ocasionar daño hepático son algunas bacterias, el virus de la varicela, los virus de la Hepatitis D y E, algunos venenos, procesos autoinmunes y traumatismos diversos, entre otros.

HEPATITIS A
Es la forma más común de hepatitis en los niños. El agente causal es un virus de la familia Picornaviridae, presente en la materia fecal de individuos infectados. En ambientes donde hay hacinamiento y mala higiene se potencia la contaminación de alimentos y utensilios. El virus de la Hepatitis A ingresa al organismo por vía oral a través del agua, de la leche y de diversos alimentos contaminados con materia fecal. La enfermedad es aguda, con un período de incubación de 15-45 días.


HEPATITIS B

El agente etiológico de esta enfermedad es un virus de la familia Hepadnaviridae. Ingresa al individuo sano a través de fluidos contaminados, como la sangre, el semen, las secreciones vaginales, la orina, la saliva, etc. La madre con Hepatitis B puede transmitir la enfermedad al recién nacido. Las relaciones sexuales con personas infectadas, las transfusiones de sangre contaminada y el compartir agujas y jeringas para la aplicación de drogas también son las formas más propicias para la transmisión de esta enfermedad. El período de incubación de la Hepatitis B puede ser de 1-6 meses.

HEPATITIS C

El virus fue reconocido en 1989. Se distingue de los anteriores porque, en la mayoría de los casos, los afectados no presentan sintomatología clínica. Muchas veces la persona descubre que tiene el virus cuando acude a un centro médico a donar sangre o cuando se realiza un completo examen de salud.
La Hepatitis C se produce por el ingreso al organismo de un virus perteneciente a la familia Flaviviridae. El agente se moviliza a través de la sangre de una persona infectada. La transmisión del virus se produce mediante transfusiones de sangre contaminada, ante el empleo de material no estéril para tatuajes y piercing, al compartir agujas y jeringas contaminadas y en menor medida por las relaciones sexuales. La madre puede transmitir el virus al recién nacido, tal como sucede con la Hepatitis B, aunque con una frecuencia mucho menor, del orden del 5 %. La Hepatitis C tiene un período de incubación de 15-50 días. Más del 50 % de los casos tienden a la cronicidad.

Signos y síntomas

En algunos casos la sintomatología de la Hepatitis A es muy leve o puede estar ausente, especialmente en niños menores de 6 años. En adultos, la cura total puede llevar algunos meses.
Po lo general, el cuadro de todas las hepatitis al principio se asemeja a los estados gripales, con fiebre, cefaleas, dolores musculares, falta de apetito y decaimiento general. Luego se afecta el funcionamiento de la glándula hepática, con lo cual los productos químicos por ella segregados se acumulan en la sangre, en especial la bilirrubina, que provoca en la piel y las mucosas el típico color amarillento, la orina de coloración oscura y la materia fecal clara. El cuadro se acompaña de náuseas, vómitos y dolor hepático. La Hepatitis C suele cursar de manera asintomática. La etapa aguda dura muy poco tiempo y se manifiesta como un pasajero trastorno hepático. El peligro que supone esta forma de hepatitis se debe a que el virus va deteriorando lentamente el hígado sin que el individuo lo sepa. Al cabo de algunos años sobrevienen cuadros severos de fibrosis, cirrosis hepática y cáncer de hígado.

Pronóstico

La Hepatitis A tiene un pronóstico favorable. El pronóstico para las Hepatitis B y C es reservado.


Tratamiento

El tratamiento de las hepatitis se realiza con fármacos específicos, según se trate del tipo de virus causal.


Prevención de la Hepatitis A
La vacunación es una forma segura de prevenir la transmisión de la Hepatitis A. En Argentina se aplica una sola dosis a los 12 meses de vida, junto con la vacuna triple viral, que inmuniza contra el sarampión, la rubéola y la parotiditis (paperas). Es importante el periódico lavado de las manos luego del estrecho contacto con personas enfermas de hepatitis.


Prevención de la Hepatitis B

La manera más segura de prevención es la vacunación. La primera dosis se aplica a las 12 horas del nacimiento, una segunda dosis a los 2 meses de edad y la tercera a los 6 meses. Con la finalidad de proteger a los futuros adolescentes de la Hepatitis B, debido a su modo de transmisión, a partir de los 11 años de edad se repite el esquema de las tres dosis, con un refuerzo al mes y otro a los seis meses de la primera aplicación, según el plan 0-1-6 meses. El uso de profilácticos ante relaciones riesgosas y el no compartir jeringas ni agujas para uso intravenoso es otra forma de evitar la Hepatitis B y muchas otras enfermedades infecciosas. El lavado frecuente de las manos también es una práctica preventiva eficiente.

Prevención de la Hepatitis C
No existen vacunas contra la Hepatitis C a la fecha. La prevención se basa en el uso de preservativos ante relaciones de riesgo y en no compartir agujas y jeringas ni objetos cortantes (cortaúñas, hojas de afeitar). Exigir el empleo de materiales estériles ante la aplicación de tatuajes, piercing o aros, en exámenes odontológicos, ginecológicos, etc.



características de la hepatitis A, B y C
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Fuente: "CIENCIAS BIOLÓGICAS" - http://hnncbiol.blogspot.com

1 comentario :

LUIS dijo...

excelente pagina me sirve de mucho como docete